BOTES. ACUARELA DE PALOMA ROJAS |
A MIS QUERIDOS EXTRAÑOS VECINOS
Como todo el mundo sabe, la gente de mi profesión somos pocos madrugadores pero muy trasnochadores. . Una vez terminada la representación de la noche, y después de la sesión de desmaquillaje y embutirme en mi propia ropa, tengo que cruzar media ciudad hasta llegar a mi casa. Por eso no es raro que el silencio en mi piso sea casi aterrador. Puedo oír mis propios pasos retumbando a lo largo pasillo. Como vivo en un primer piso, sé que no hay posibilidad de despertar a ningún vecino y en cuestión de segundos Morfeo se ha apoderado de mí.
No conozco a mis vecinos de arriba, tan solo se de su existencia por los sonidos que diariamente emiten.
Cuando he alcanzado el estado REM, y estoy en lo mejor de mi sueño,me despiertan varios tac, tac, propinados a las puertas de las habitaciones situadas a lo largo del pasillo. Exactamente 6 pues la distribución de los pisos es la misma en todos.
Sé que a este repiquetear le seguirá un leve minuto de silencio, interrumpido por un desbordamiento de aguas similar a las cataratas del Niágara. Después vienen diez minutos de silencio, que será roto por una marcha militar de 12 pies hacía la cocina de la casa. En ese momento parece que todos los pájaros del parque cercano se han concentrado en ese punto para conversar.
Durante aproximadamente quince minutos escucharé seis portazos consecutivos.
Luego viene la paz.
No tengo nada contra mis vecinos. Tan solo quiero saber quiénes son mis queridos extraños vecinos.
Alguien te diría lo tines muy fácil sube y presentate.
ResponderEliminarDejando las bromas a parte.
Buen relato además me gusta que has conseguido decir mucho en menos espacio y por lo tanto está mas adaptado para una publicación en un blog.
Un abrazo
Exactamente. Y no ocurrió. Sin embargo, es un hecho real, escuchado por mi, a la vecina que lo leyó en periódico mientras desayunaba. No es exactamente lo que el actor escribió- casi es un plagió - pero es un hecho real.
ResponderEliminarGracias por tu visita. Últimamente estoy poco animada a escrbir: perezosa. Ya veo que tu no.
Un abrazo fuerte
Eso es lo que tiene vivir en un piso, tener que aceptar lo de cada uno, es fácil no conocer al vecino de arriba, cada vez más ya que estamos en un tiempo que somos muy individualistas y eso a mi me entristece.
ResponderEliminarMe gusta leer tus escritos, ya lo sabes pero cuando son así de "escuetos" y bien "trazados" mucho más.
Abrazos querida amiga.
¡Que buena eres Higorca! Es algo que tenía por ahí, y como hacía tanto tiempo que no había subido nada, me he lanzado a hacerlo.
ResponderEliminarPensaba escribirte porque hace mucho tiempo que no se nada de ti.Lo haré cualquier día de estos.
Un abrazo fuerte
Bueno, pues lo he leído dos veces y puedo decir que es original...intrigante...todo condensado en lo qu pudiera ser un minirrelato. Tienes que animarte a escribir...pero es normal tener altibajos, no te preocupes. Un beso grande.
ResponderEliminarEstoy perezosa, lo reconozco. Es como si no tuviera mucho que decir. Como tu dices, no me voy a preocupar, ya volverán las ideas.
ResponderEliminarMuchas gracias por tus ánimos.
Un abrazo fuerte
Hola Begoña, un saludo de un santurzano, un placer leerte
ResponderEliminarMuchísimas gracias por tu visita.Recibo con agradecimiento tus invitaciones a encuentros de poetas pero llevo una temporada un poco ocupada. Muchas gracias de todas formas
ResponderEliminarUn saludo